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Muchos empresarios concuerdan que prestar el mejor servicio posible es lo que garantiza atraer al público. Esto va desde la concepción de un producto o servicio hasta la atención y la entrega al cliente final. Esta filosofía acostumbra llevar a la creación de un sistema de gestión de la calidad total del servicio al público.

No obstante, algunas empresas pueden presentar dificultades en esta tarea por creer que aumentar y controlar la calidad del producto implica necesariamente aumentar el costo de producción. Cuando, de hecho, ocurre lo opuesto: la empresa tiende a reducir sus costos y a aumentar su rentabilidad.

Para demostrar mejor esta cuestión, separamos algunos medios por los cuales un sistema de gestión da calidad puede aumentar los márgenes de renta de los productos. ¡Continúe leyendo!

Encontrando las fallas en el proceso

Para evaluar la calidad final de un producto es necesario tener en mente todo el proceso involucrado, desde cualquier materia prima hasta la entrega. Esto significa que, con una evaluación completa, es posible detectar cualquier falla en el flujo de trabajo, observando en cuál puede haber desperdicio de recursos y tempo.

Otro punto importante es observar el origen de esos errores. ¿Los empleados no están recibiendo el entrenamiento adecuado? ¿El material utilizado no cubre las expectativas del público? ¿Hay procesos burocráticos que atrasan las ventas? Todo puede y debe ser evaluado por la gestión de la calidad para evitar la acumulación de pequeñas perdidas. Así, es posible reducir el costo bruto de la producción sin perder la calidad de vista.

Optimizando y automatizando trabajos manuales

Ya se ha mencionado la optimización como factor muy relevante para aumentar el margen de rentabilidad de un producto. Pero, hay otro aspecto involucrado: la automatización. Cada minuto u hora de más que un empleado pasa completando una hoja de cálculo es el tiempo que podría estar conversando con otro cliente o resolviendo problemas que demandan la acción humana.

Adicionalmente, este método deja muy dispersa toda la información, lo que dificulta el análisis de datos. Con un sistema automatizado de gestión de datos, este proceso será mucho más rápido y preciso, permitiendo a la dirección tomar decisiones mejor informadas en menos tiempo.

Utilizando la gestión de la calidad en pro de los clientes

Un error común en algunos sectores es perder de vista quienes son los clientes y concentrarse solo en un proceso cerrado. Este error es tan grave que dependiendo de las condiciones, puede llevar a algunas empresas a la ruina. Las decisiones tomadas en la dirección deben orientar el funcionamiento más orgánico de la empresa, especialmente si fuera necesario integrar varias filiales. Pero tampoco podemos olvidar que quien cubre los costos es siempre el cliente.

Un método por medio del cual el sistema de gestión de la calidad puede mantener la empresa cercana a su público es la búsqueda de opiniones. Esta puede darse de varias formas: desde pequeños cuestionarios luego de la compra hasta una conversación más prolongada. Este método puede ser más adecuado para empresas que acompañan a sus clientes por mayores períodos. Con este feedback, la dirección puede encontrar problemas que no son detectables por quien está muy cercano a la producción.

¿Le han gustado nuestros consejos sobre la gestión de la calidad y su efecto en la rentabilidad del producto? Entonces aproveche para acompañarnos en LinkedIn!