El constante avance de la tecnología ha dado lugar a herramientas que optimizan el potencial de las empresas y permiten que los servicios o productos estén mucho más alineados con las necesidades del consumidor. Este nuevo conjunto, anteriormente inviable, se conoce como disrupción digital.
Básicamente, el término se usa para clasificar los modelos de operación de negocios que satisfacen a los clientes de manera más eficiente mediante el uso de la tecnología. Teniendo en cuenta la cantidad de herramientas disponibles y los efectos que tienen en el rendimiento de una empresa, no es exagerado decir que las empresas que descuidan la tecnología están obligadas a quedarse rezagadas.
Tecnología creando posibilidades
Cuando pensamos en la disrupción digital, es posible que grandes empresas como Google y Microsoft pronto se nos ocurran. Pero el concepto es mucho más amplio y puede involucrar a un mayor número de empresas.
El término «disrupción» está directamente relacionado con romper con las viejas prácticas y barreras mediante el uso de la tecnología. Incluso una pequeña empresa, capaz de utilizar la tecnología para crear medios más eficientes para atender a sus clientes, puede considerarse como disruptiva.
Por lo tanto, la disrupción digital no se trata del tamaño de una empresa, sino de la forma en que utiliza las innovaciones tecnológicas a su favor. Esto significa que incluso las empresas más pequeñas deben comenzar a disfrutar de los beneficios de la innovación; de lo contrario, se quedarán atrás.
Los principales motores de la innovación
Nuevas herramientas tecnológicas están disponibles todos los días. Por lo tanto, poder considerar algo nuevo (o incluso una aplicación más antigua que no se usa tan bien) y pensar en nuevas funciones puede verse como una ventaja competitiva.
Pero hay algunas innovaciones que atraen más atención y han presentado buenas perspectivas para el futuro. Entre ellas, podemos mencionar las siguientes.
Internet de las Cosas
Las personas viven rodeadas de una serie de objetos que hacen que la vida cotidiana sea más cómoda. Algunos de ellos, como el refrigerador y la estufa, han sido parte de nuestra vida diaria durante bastante tiempo. El propósito de la Internet de las cosas es conectar estos elementos mediante sensores e Internet, dándoles una serie de nuevas funciones.
Al utilizar la tecnología, un refrigerador puede evaluar cuándo un producto está a punto de caducar y enviar un correo electrónico a sus propietarios, solicitando que se deseche el producto en cuestión. También podría ponerse en contacto con el mercado y pedir un nuevo producto del mismo tipo.
Básicamente, la tecnología permite que los objetos que nos rodean aprendan sobre nuestras preferencias y se adapten a ellas.
Inteligencia Artificial
Cualquier persona con un nivel mínimo de conocimiento entiende la forma en que el software hace que nuestras vidas sean más fáciles. A través de algoritmos, pueden realizar varias funciones que un ser humano no podría (o le llevaría mucho tiempo).
A pesar de este potencial, el software está limitado a su programación, y para que pueda realizar diferentes funciones, debe incluirse en su código. El concepto de Inteligencia Artificial va más allá y tiene como objetivo desarrollar sistemas que aprendan interactuando con humanos o analizando datos recopilados por otros medios, como sensores.
Entre las características de esta nueva tecnología, podemos mencionar la automatización de las compañías e incluso los autos inteligentes, capaces de moverse por su cuenta.
Realidad aumentada y realidad virtual
Aunque los términos «realidad aumentada» y «realidad virtual» son similares, sus significados prácticos son diferentes.
La realidad aumentada recibe su nombre porque su propósito es expandir la cantidad de información a la que tenemos acceso en nuestra realidad actual. Al usar un dispositivo, sería posible mirar un determinado lugar turístico y obtener mucha información sobre este, o incluso observar un producto y ver un informe sobre su origen, por ejemplo.
En cuanto a la realidad virtual, la intención es sumergir completamente a su usuario en una nueva realidad creada digitalmente. Ambas tecnologías tienen el potencial de cambiar la forma en que vemos los productos, servicios y el mundo que nos rodea.
Modelos de negocios disruptivos
Por muy útil y prometedora que sea una tecnología, pierde su significado si no se usa adecuadamente. Por esa razón, varios modelos de negocios fueron diseñados para hacer un uso más efectivo de tales herramientas. ¡Aprenda sobre algunos de ellos a continuación!
Freemium
Atraer clientes y vender un producto, especialmente cuando todavía no se conoce en el mercado, es una tarea difícil. Con eso en mente, algunas compañías decidieron poner los artículos a disposición de forma gratuita y cobrar por versiones o beneficios más completos.
Este modelo de operación, conocido como freemium, aumenta el alcance de los servicios y las ganancias mediante la venta de funciones exclusivas o más avanzadas. Por lo general, es utilizado por los desarrolladores de software y juegos.
On Demand
On demand es un modelo de operación que permite al cliente tomar decisiones más profundas sobre el servicio o producto que se va a utilizar. Muy adoptada en la transmisión, esta modalidad permite al consumidor decidir el contenido y el tiempo en el que desea verlo. Como ejemplos podemos mencionar a Netflix y Crunchyroll.
A medida que el concepto se hace más conocido, tienden a surgir nuevas aplicaciones. De esa manera, la demanda debe ser común en áreas que van más allá del consumo y la producción de contenidos.
Mercado
De manera simple, el mercado puede definirse como un tipo de centro comercial virtual o plataforma digital que agrupa a un gran número de tiendas en línea. A través de este, el consumidor tiene acceso a varios productos y busca los mejores precios de manera más eficiente.
Normalmente, este modelo de negocio se beneficia al cobrar pequeñas comisiones por las ventas realizadas en la plataforma o algún tipo de tarifa mensual. También es posible vender servicios premium, siguiendo el modelo freemium.
Más que simplemente crear una nueva tecnología, la disrupción digital tiene que ver con cómo se utilizan las herramientas tecnológicas a nuestra disposición. Las empresas que pueden hacer un uso más eficiente de la tecnología tienden a lograr mejores resultados.
Por lo tanto, no es exagerado decir que el éxito de una empresa está directamente relacionado con su capacidad para actualizarse.