Cuando hablamos de “costos en un ERP”, existe mucho más un sesgo contable / legal / fiscal que una solución completa para la gestión de costos. Ciertamente, en el ERP tendremos la ficha técnica, la asignación de mano de obra directa, entre otros, pero la apropiación de todos los costos depende de las reglas que se deben crear para las asignaciones respetando una relación de causa y efecto. El tratamiento de los costos indirectos, por ejemplo, es algo que debe personalizarse en un ERP y, por regla general, estas personalizaciones en el ERP son costosas y demoradas. Otro tema importante tiene que ver con la comprensión de los «costos de servicio» para un análisis detallado de la rentabilidad cliente a cliente (no simplemente analizar el volumen consumido por cada cliente, sino cuánto este mismo cliente demanda de esfuerzo de ventas, marketing, logística y otras áreas de la organización). También sabemos lo costoso, lento y complejo que es cualquier cambio en los ERP. Y, finalmente, existen particularidades en una gestión de costos eficiente que no se abordan en los ERP, como las asignaciones recíprocas (p. ej.: RR.HH. asigna sus costos a TI y a Producción; TI asigna a RR.HH. y a Producción. Es decir, entre RRHH y TI existe una reciprocidad de asignaciones que debe hacerse de forma transparente).